EDITORIAL
La prescripción de fitofármacos basada en la evidencia
Prescription of phytomedicines based on evidence
La investigación científica sobre los fitofármacos intenta rescatar el conocimiento de la flora medicinal, descubrir sus posibilidades terapéuticas y realizar los procedimientos pertinentes para ponerlos al alcance del médico y que dichos productos puedan ser dosificados adecuadamente con mayor calidad y seguridad con su correspondiente prescripción.
El conocimiento de las ventajas y desventajas del consumo de las plantas medicinales contribuye a desarrollar nuevas estrategias y métodos adecuados para evaluar sus posibles efectos dañinos y beneficiosos.
La búsqueda de evidencia para la práctica médica es una vía para que el conocimiento tenga verdadero impacto social. El constante aumento de la información está marcado por el desarrollo de las nuevas tecnologías de la información y las comunicaciones. El profesional debe preferir las fuentes de información que impliquen búsquedas bibliográficas y valoraciones críticas en favor de una mayor eficacia y veracidad de la investigación en lugar de fuentes de fácil acceso.
La literatura médica no siempre tiene repuestas para las decisiones que se deben tomar en la práctica. En el caso de la práctica prescriptiva de la fitoterapia, no se cuenta con suficiente bibliografía que evidencia la eficacia y seguridad del uso de las plantas.
Existen suficientes razones para desarrollar la medicina tradicional y natural con el objetivo de lograr el perfeccionamiento integral del binomio salud-enfermedad y de la relación médico-paciente, para alcanzar el mejoramiento de los recursos terapéuticos, disminuir las reacciones adversas y reducir al mínimo los costos de su empleo con vistas a generalizar convenientemente su aplicación en todo el país.
Sin embargo, el desarrollo de la medicina tradicional y natural debe basarse en la mejor evidencia científica disponible, sobre todo por la creencia generalizada de que por ser productos naturales no tienen efectos adversos ni interacciones con otros medicamentos o contraindicaciones.
El ejercicio de la práctica clínica con calidad es un proceso continuo y constante de aprendizaje durante el cual es necesario consultar la información clínica relevante que existe acerca del diagnóstico, el pronóstico, la terapéutica, el análisis de las decisiones y de los costos y beneficios. Por ese motivo, es necesario incrementar la producción científica con nuevas investigaciones de manera que, en la práctica clínica, los fitofármacos se prescriban respaldados por las evidencias científicas.
Dr.
C. ANA JULIA GARCÍA
MILIÁN
Profesora
e investigadora titular
Escuela Nacional
de Salud Pública